El packaging de comida vuelve a «lo artesanal»
Dicen que «la belleza está en el interior», pero un buen envoltorio siempre ayuda. De ahí la importancia del Packaging, todo un arte que va mucho más allá de ser meramente “lo que envuelve a un producto”.
Un buen Packaging tiene que dar ganas de comprar, y hasta de comer. Sí, has leído bien: ganas de comer… al menos si lo que envuelve es un producto alimenticio. ¿Y cómo se está consiguiendo eso actualmente? Pues, cuidando mucho la creatividad y siguiendo la última tendencia en diseño de packagings de comida: Darle un aspecto rústico y artesanal.
A continuación, os mostramos varios ejemplos de este tipo de Packaging “rústico” y los rasgos que caracterizan a esta tendencia en diseño más artesanal:
- Se usa papel o cartón reciclado, en lugar de recurrir a plásticos:
Se emplean cordeles o cintas para cerrar los embalajes, en lugar de grapas o adhesivos:
Se utilizan tipografías que tengan apariencia de estar «hechas a mano»:
Minimalismo al poder para conseguir un grafismo sobrio:
Lleva sólo el color negro, en lugar de combinar muchos colores:
Hace que despierte los sentidos, incluyendo materiales que dejan captar el olor del producto
“Lo casero” está de moda, y después de años de industrialización, vuelven los valores de “lo hecho a mano” que siempre aportan al producto un aspecto de ser “más natural”. También es verdad, que habría que constatar si la imagen que se le está dando a los productos se corresponde con la realidad… pero lo cierto es, que cada vez son más las empresas alimenticias que están renovando su apariencia hacia lo artesanal. ¿No se te ha despertado un poco el apetito? 😉
Visto en María Victrix.